Estas fotos me recuerdan mi esperiencia con un muchacho albañil de la cuadrilla que contrataron mis padres para realizar una reforma en nuestra casa. Yo tenia 19 años y ya habia tenido alguna esperiencia con compañeros de instituto que me acompañaban en los estudios desde que eramos colegiales. Aquel albañil tenia 24 años y un día regresó a casa para recoger algo que habia olvidado. Me descubrió pajilleándome con una revista gay. Yo me puse rojo y nervioso, pero el me tranquilizó y se ofreció a terminar conmigo el contenido de la revista. Poco después me cogió la cabeza y la llevó a su entrepierna invitándome a chuparle el cipote. Un cilindro grueso y fuerte, poco después me tenia abierto de piernas, de espaldas y sintiendo la ficción de su capullo húmedo rozándose con mi ano. Fue una penetración suave y profunda, me follaba con fuerza y deprisa. Sentia su polla entrar y salir de mi culo en un ritmo incansable. Fue la primera vez que tenia un cipote tanto tiempo dentro, trabajándome y produciéndome un placer hasta ahora nunca sentido. Me llevó al orgasmo al mismo tiempo que el explosionaba como un volcán, llenándome con su abundante y caliente semen. Mi eyaculación fue larga y mi lefa abundante, me costaba correrme por la presión de su polla en mi interior, lo que me produjo un placer insuperable.
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